«Las mujeres y la pesca artesanal» por Ana María Bravo, Diputada

Hace unas semanas atrás el presidente Gabriel Boric anunció la habilitación de 12 caletas pesqueras con perspectiva de género, apuntando a generar mejores condiciones para las mujeres que se desempeñan en este rubro; entre vergonzosas burlas y fuertes críticas de políticos de derecha.

Debo decir que es lamentable que se desconozca la problemática que enfrentan las mujeres de la pesca artesanal y actividades conexas, apelando al falso argumento de que el gobierno no atiende los «reales problemas de la gente», banalizando la necesidad imperante de las mujeres de la pesca artesanal de contar con al menos con las condiciones higiénicas y sanitarias para desempeñar sus labores.

Es así que adhiero firmemente a la declaración publica emitida por la Red de Mujeres de la Pesca Artesanal y las palabras de su presidenta Sara Garrido, donde decimos fuerte y claro que esto no es vestir caletas de rosado, es dignidad laboral.

El proyecto del gobierno viene a impactar en corto y mediano plazo en el desarrollo productivo y la sustentabilidad del sector, incorporando también una cuota de género en los espacios de toma de decisiones donde se discuten planes de gestión y planes de manejo.

Cabe mencionar que yo también presenté un proyecto de Ley que establece normas de igualdad género en los comités de manejo de la pesca, siendo despachado al Senado entre fuertes comentarios de la oposición que buscaban desacreditar en todo momento la necesidad de una real participación y reconocimiento de las mujeres y la importancia de la equidad de género.

Históricamente la pesca artesanal ha sido un rubro masculinizado, en donde si bien existe presencia femenina, esta ha sido invisibilizada por décadas negándonos el derecho a participar en la toma de decisiones.

Es importante recalcar que este tipo de iniciativas no busca generar disputa, por el contrario, los pescadores hombres deben entender el aporte real que desempeñamos las mujeres y como en conjunto podemos hacer crecer aún más la pesca artesanal en Chile.